EXPERIENCE FLOW

Pros: 

1 - La opción ideal para aquellos que quieran empezar a adentrarse al mundo Altra con una zapatilla fácil a la que hacerse.

2 - Tejido y diseño del upper. Es cómodo, genera estabilidad y además no cuenta con grandes piezas estructurales.

3 - Destacar el tema de la horma. Con los 4mm de drop se posiciona como una opción similar a otras del mercado pero con el diferencial (positivo o no) de contar con un ancho de horma más generoso de lo normal.

4 - Zapatilla para entrenar a diaria con la que empezar a trabajar técnica de carrera

5 - La puedes utilizar en todo tipo de superficies. Su suela tiene una gran adherencia en terrenos pisteros y también en asfalto (húmedo y seco)


Contras: 

1 - La espuma utilizada. Es firme y tiene poca respuesta.

2 - La baja altura y el acabado en el lateral del collar hacen que con según que calcetines te pueda generar molestia.

3 - El caucho del talón más la poca compresión del EVA hacen que a ritmos tranquilos (entrando de talón) la zapatilla no sea la más cómoda...

4 - La caja de dedos es ancha pero no alta. Es decir, de espacio lateral va bien sobrada pero en algún punto parece tener "techo" y los dedos tocan.
 

Altra vuelve al ataque (y esta vez muy en serio) con lo de subir sensiblemente los drops para abrir de esta manera la puerta a más y más corredores. El pasado 2023 lo terminamos probando la FWD Experience y ahora nos encontramos con 3 modelos metidos dentro de una nueva gama llamada “experience” que comparten varios denominadores en común.

La Flow, la Form y la Wild son las tres zapatillas de Altra que conforman esta nueva gama de modelos que propone algo distinto a lo que siempre nos tenía habituada la marca norteamericana. ¿Es un tema márketing? ¿Realmente le hará perder la esencia Altra?

Dejando de lado la Experience Wild, que está enfocada al trailrunning, la Form y la Flow son dos zapatillas casi idénticas. Lo único por lo que se diferencian es por la recomendación hacia el corredor a quien van dirigidas. La Form tiene un sistema de control de la pisada, por lo tanto, para aquellos que tiendan a pronar, les vendrá de perlas mientras que la Flow, la que hoy nos ocupa, es una zapatilla completamente neutra.

Hasta aquí una mini introducción de esta nueva familia. Ahora toca centrarnos en la Experience Flow, la zapatilla que coge el testigo de la pasada FWD Experience y que de hecho, comparte infinidad de similitudes con esta. La verdad es que en carrera han sido pocas las diferencias que hemos encontrado entre la “vieja” y la nueva versión.

Cuatro milímetros de drop que la convierten en más apetecible para muchos corredores, la horma más generosa como singularidad de marca y unos rockers y geometrías que permiten un correr fluido con un puntito de flexibilidad y sensación de terreno en la parte delantera.
 

Si optas por Altra es porque tienes curiosidad por la marca.

En Estados Unidos es una marca sobradamente conocida, pero en España es por el momento, una de las grandes desconocidas.

Así que lo primero que deberías de hacer, es conocer la filosofía tan singular de los americanos. Lo que seguramente hayas escuchado es que es una marca que trabaja el drop de 0mm en la mayoría de sus zapatillas y que además, ofrece una caja de dedos más ancha y generosa de lo habitual.

Pues bien, de lo primero, olvídate en esta Experience Flow. Los 4mm de drop de esta zapatilla son sin ninguna duda, el gran aliciente para probarlas. La marca parece dar un pequeño giro de timón ofreciendo un modelo que, aunque mantiene gran parte de la esencia de Altra, sube sensiblemente la diferencia entre el talón y la puntera hasta los 4mm.

Como decíamos, todo lo demás sigue en la misma dirección. La caja de dedos u horma verás que es más ancha de lo habitual. Su forma redondeada y su diseño te pueden hacerte sentir extraño al principio, pero verás que cuando le coges el gusto y te haces a ello, cuesta mucho quitárselo de encima.

A nivel de drop y de geometrías, la Altra Experience Flow es una zapatilla que juega mucho con las formas encurvadas. La zapatilla no es para nada técnica y es fácil hacerse a sus 4mm de drop. De hecho, en algún punto, no nos ha dado la sensación de tener ese drop. ¿Invita a pisar sensiblemente adelantado?

Puede, pero lo que sí agradecemos es que el rocker delantero sea pronunciado y que la parte delantera tenga cierta flexibilidad, de esta forma la transición es como muy “continua” y fácil.

Lo que sí queremos decirte es que la Experience Flow ofrece “premio” si al subir el ritmo, por ejemplo, adelantas tu pisada. Aquí el modelo responde mejor y es aquí donde sinceramente más nos ha gustado la renovación de la FWD Experience.

Lo que quizá menos nos ha gustado y lo que creemos que Altra tiene mucho margen de mejora, es en el compuesto o espuma utilizado en la mediasuela de esta zapatilla.

Repitiendo con lo mismo que teníamos en la FWD Experience, Altra, ha optado por su compuesto más básico. Un EVA prensado algo denso al tacto que, a ritmos más suaves, no es tan cómodo como inicialmente esperábamos. Este material, además, es bastante propenso al desgaste. Las arrugas y pliegues que se empiezan a generar con unos 50-60km de uso no responden a lo que queremos. Por el momento no afecta al rendimiento, pero ahí están.

La espuma en sí no tiene excesivo rebote ni tampoco una sensación de dinamismo demasiado pronunciada. Es un EVA que amortigua, que protege, pero poco más. ¿Por qué no habrán optado por alguno de los compuestos que Altra tiene en otros modelos?
 

El movimiento más “continuo” que ofrece la zapatilla gracias a sus geometrías y la densidad de la espuma, hacen que el correr sea más “guiado”. Si a eso le sumamos que la base de la zapatilla es bastante generosa, podemos afirmar que la zapatilla es bastante estable.

Al final Altra ha buscado tener otro modelo más protegido y amortiguado que la Torin 7 y sobre todo, con un drop más común y menos “reticente” que los 0mm por los que todos conocemos a Altra.

En cuanto a lo que podemos o no podemos hacer con la Experience Flow, la verdad es que estamos ante una zapatilla muy prestada al día a día. Para entrenar rápido no está pensada, y de hecho, si la pruebas a ritmos vivos lo notarás. Nosotros hicimos un par de salidas a ritmo moderado y reconocemos que les faltaba una o dos marchas de más, sobre todo si la serie era un poco larga…

Contrariamente a ritmos más suaves (pero no suaves del todo), por ejemplo por encima de los 4’20”/km-4’30”/km es una zapatilla que se desenvuelve realmente bien.  El recorrido y la poca elasticidad que tiene la espuma permiten no quedarse “hundido” entre la espuma, lo cual, si subes el ritmo, no te quedas atrapado cada vez que impactas con la zona del ante pie.

El conjunto en general es bastante ligerito, y eso hace que tampoco penalice en exceso en esos ritmos. Con la Experience Flow puedes correr bien en cualquier tipo de entrenamiento diario y además, si te da el gusanillo y te adaptas correctamente, te puede ayudar a dar el salto (si quieres) a los “zero drop” del resto de zapatillas Altra.

En cuanto al upper, la verdad es que la elegancia es lo que más resalta de el. El acabado del mesh está realmente cuidado y de hecho, con pantalones tejanos te aseguramos que queda a las mil maravillas.

En carrera acomoda bien, concretamente el talón y su acolchado hacen su función a más no poder. Lo único que vemos como hándicap es la baja altura que este tiene en sus laterales y que, con según que calcetín más cortito y fino, no nos ha terminado de gustar.

Por el resto, un engineered mesh funcional y suficientemente transpirable. La verdad es que airea bastante bien, a pesar de que es de esos que a simple vista puede parecer que cogerán  rápidamente la humedad. Nosotros hemos venido utilizando la Flow Experience durante el mes de Mayo y Junio y en general bien, incluso en horas centrales del día donde el calor aprieta.

Lo que creemos que favorece esa sensación de no agobiar, es el ancho de la horma. Lo que Altra trabaja con el Standard Footshape, no deja de ser el extra de tamaño y estructura en la puntera de la zapatilla que deja espacio más que de sobras para que los dedos se muevan por sus anchas. En el caso de la Flow Experience tenemos el “standard”, pero deciros que la marca juega con hasta 4 tipos de horma según la zapatilla y su propósito (más competición más estrecha y más rodadora, más ancha).

Personalmente nos encanta sentir como la zona del puente y el arco queda prieta, y la zona delantera queda “desahogada”. Como siempre decimos, si los cordones cumplen y el ajuste es el adecuado, no tendrás problema. El problema viene si la parte media queda suelta y la zona delantera también. Entonces aquí sí que tendremos un problema serio de desestabilización y movimiento del pie en el interior de la zapatilla.
 

Es curioso porque el upper, aunque tenga muchísimas protecciones en la zona trasera, no ofrece restricción alguna. Parece una tontería, pero el simple hecho de no utilizar ninguna pieza rígida o plástica que haga de estructura en el contrafuerte, dan una sensación de mayor libertad y de 0 restricciones.

Probablemente para los que más soporte pueden necesitar en esa zona o incluso mayor seguridad, podría no ser lo mejor, pero para el resto, sobre todo si tiendes a pisar más adelantado, (porque no necesitas tanto el talón), será un feeling que seguro te gustará.

En la suela, Altra sigue manteniendo un dibujo único. Observa bien esta plataforma ancha y generosa.

La tecnología Inner Flex es algo que nos gusta de la marca, y es algo que hace especial a la casa norteamericana. Los surcos de flexión que tenemos en la suela se disponen verticalmente y acompañan el movimiento “natural” del propio pie. Todo ello sin restringir la flexibilidad que anteriormente mencionábamos en la zona delantera de la zapatilla.

Con ella corrimos varias veces por zonas pisteras fuera del asfalto y no podemos ponerle apenas quejas. Lo único que podemos decir es que en a través de los surcos expuestos, pueden quedar pequeñas piedrecitas incrustadas en su interior. La verdad es que la zapatilla protege correctamente y su adherencia, es muy coherente (teniendo en cuenta que es una zapatilla teóricamente asfaltera). Por cierto, si eres de Trail y quieres exactamente lo mismo, la Experience Wild es tu zapatilla.

El tacto denso de por sí que tiene la espuma de la mediasuela, más el grueso perfil de caucho en la zona del talón, hacen también que el aterrizaje contra la superficie sea sensiblemente más durito de lo habitual, sobre todo a ritmos lentos. Cuando ya aceleramos o pisamos más adelantado, la sensación queda mucho más disipada.