Brooks Ghost Max 2 VS Puma Speed 1000 S Ignite

Pros: 
1 - Una opción fiable y estable dentro del mercado para entrenamientos de volumen y para corredores de todo tipo.
2  -Upper cuidado y sobre todo cómodo interiormente y con buen espacio en la zona delantera.
3 - Tracción de la suela en diferentes terrenos y superficies (siempre y cuando estén secos).
4 - El DNA Loft v3 le da un toque más premium al modelo y puede que algunos lo noten algo más reactivo en carrera.
5 - Las geometrías de la mediasuela hacen que gente con plantillas personalizadas, con pies anchos o con arcos planos, se puedan adaptar bien a ella.

Contras: 
1 - Poca versatilidad. Nos ha costado mucho "sacarla" del rodaje controlado y suave.
2 - El DNA Loft v3 no es quizá lo que esperas a nivel de tacto. La zapatilla invita a pensar en otro tipo de compuesto más blando y amable.
3 - Ojo la lengüeta. Si no atas bien los cordones tiende a moverse lateralmente.
4 - No te la recomendamos si buscas un modelo flexible, con rebote y dinámico.  

LLegan a nuestras manos estas Puma Speed 1000 S Ignite y nos encontramos que visualmente destaca, sobretodo, la capa de Ignite de un color anaranjado, bastante "chillón". En cambio, por la cara interior, encontramos el "Stability Zone" que ya nos condiciona a relacionarlo con  control de la pisada y amortiguación. Aunque no sean las más ligeras del mercado (404 gr en la talla 10 US) tienen una línea aerodinámica que a su vez nos sugiere velocidad y este aspecto nos ha encantado.
Otro aspecto que nos deja entrever, es el buen ajuste del pie a la zapatilla. Un sistema de sujeción algo diferente a lo que estamos acostumbrados. El símbolo de Puma  yendo de más ancho a más fino en la zapatilla le da una sensación de aerodinamismo a las Puma Speed 1000 S Ignite muy conseguida. En la parte superior del talón, hay una zona rígida que bordea en el que vemos claro, que nuestros talones van a ir muy bien encajados. 
Por otro lado, la suela tiene unos cortes horizontales a priori, debería facilitar la flexión. Aunque no es así cuando intentamos flexarlas con las manos. Al calzarlas por primera vez, la primera sensación es de confort y estabilidad. Una vez en el pie, nos movemos con ella, damos pequeños saltos y destacamos la sensación de estabilidad que tienen...estamos con muchas ganas de darles kilómetros.