Salomon S-Lab Sonic VS New Balance Fresh Foam Zante

S-Lab Sonic

Salomon

Salomon S-Lab Sonic

Primeras impresiones

Dicen que la primera impresión es la que cuenta, ¿no? Pues la verdad es que no van muy desencaminados y cuando vimos estas Salomon S-lab Sonic por primera vez nos enamoramos de ellas. Su color rojo intenso nos encanta, y que decir del diseño: muy en la línea de las S-lab de la casa francesa. simplemente increíble.
Cuando cogemos las Salomon S-lab Sonic por primera vez, vemos lo ligeras que son. En un 11 US pesan tan solo 230 gr, un peso digno de unas auténticas voladoras. Cuando comprobamos la flexibilidad vemos que lo hacen bastante fácil y que el retorno es muy rápido.
Al calzárno las Salomon S-lab Sonic no cuesta nada entrar el pie, aunque el collar no es demasiado ancho, pero no supone un problema. Lo primero que notamos, antes de ajustarlas es la increíble sujeción que ofrece su sistema Endofit, que es una especie de botín de tela elástica que se adapta a la perfección al pie, y ya cuando acabamos de ajustarla con los cordones, no os podéis imaginar la sujeción tan perfecta que ofrecen.
Empezamos a dar los primeros pasos y notamos lo bien que flexan y lo ligeras que son, pero nos impacta bastante la rigidez de su amortiguación. ¿Creéis que puede ser un problema a la hora de correr?
 

Fresh Foam Zante

New Balance

>New Balance Fresh Foam Zante

Primeras impresiones

En concreto, este par de las Fresh Foam Zante han viajado y mucho. Tanto es así, que han cruzado el charco hasta llegar a su país de origen para ser recibidas por su probador.  Nueva Jersey fue dónde llegaron empaquetadas y listas para poner en marcha.  El sr DHL nos dio la caja y rápidamente nos dimos cuenta que no estamos delante de una de las “pesadas”.   214 g de peso que gracias a un upper  “simple” sin grandes estructuras hacen de esta, una zapatilla pensada a primera vista para imprimirles un buen ritmo.
Una vez en las manos damos credibilidad al dato del peso, pero sobretodo nos quedamos más “pillados” con la mediasuela. El fresh foam brilla por si mismo, literalmente, parece estar barnizado. El diseño, sin más, en general poca estructura tanto en la suela como en el upper, prácticamente podríamos decir nada.  Si queremos escoger el color, New Balance, no ha escatimado en eso, tenemos hasta 7 combinaciones para escoger, así que no hay excusa para ser de estas, nuestras zapatillas.
Como dijimos, poca filigrana a nivel de upper. Una horma muy simple para minimizar en peso que nos permite chafar la zapatilla al completo. La protección trasera del talón prácticamente nula y un material un pelín más duro en la puntera de la zapatilla.  Filigrana también la justa en la suela, toda del mismo color, sin ningún tipo de surcos o zonas más duras, simplemente un taco que expande su forma en la zona del metatarso justo dónde hay la superficie más ancha del pie.
Parece ser que transpirabilidad y ligereza no nos faltaran, pero tendremos que ver si esta ausencia de estructuras afectará en la comodidad y confort.
Fue recibir y poner, tal cual, al momento, con los tejanos puestos. Primero para comprobar la talla y después para poder gozarlas y adaptarlas a nuestro pie. Pues bien, lo primero nos parecieron justas y a lo segundo, parecía que lleváramos únicamente los calcetines. Poco peso y un Fresh Foam que daba un buen toque de amortiguación, no extremadamente suave, pero si realmente cómodo pensado para rebotar en el suelo.
 

Autor: Ruben, Carles Nebot

Fecha de publicación: null

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