New Balance RC 1400v4 VS Hoka Tracer

Saber que vamos a probar las New Balance RC 1400v4 nos provoca un extra de expectación. Al abrir la caja por primera vez nos fijamos en el colorido tan llamativo con el que se nos presenta este modelo, el rojo chillón de la parte delantera seguro que no pasará desapercibido. Otra cosa que nos llama mucho la atención es que, tratándose de una zapatilla situada en el segmento de las voladoras, su perfil en la mediasuela es bastante considerable, cercano o similar a unas mixtas o incluso a unas zapatillas de entrenamiento. Más adelante veremos, que por las características del material que conforma la mediasuela, ese perfil moderado no aporta otra cosa que puntos positivos en el resultado final de nuestra protagonista. 
Son bastante flexibles, sobretodo en la zona del antepié y admiten cierta torsión con relativa facilidad. La sensación de ligereza al cogerlas destaca notablemente, en la báscula nos dan 218 gramos en la talla que vamos a probar, el 9,5 US. Nos parece a simple vista una zapatilla muy bien trabajada, rematada con sumo cuidado y por qué no decirlo, incitan a la velocidad sin contemplaciones. 
Nos sorprende muy gratamente la comodidad que desprenden al calzárnoslas por primera vez. Desde el primer momento notamos como el pie se encuentra con una sensación de confort destacable. Para ser unas voladoras por naturaleza, notamos que no son tan estrechas como otras zapatillas de este estilo, sino más bien tiran hacia una horma convencional. 
En su interior, las New Balance RC 1400v4, son muy convincentes al tacto, muy suaves en su parte trasera, y agradables sin más en las zonas de ante y mediopié. Una vez echado el primer vistazo, y seguros de que nos van a encantar,  vamos a ver paso a paso qué esconden estas zapatillas y si realmente son tan buenas como intuimos.

La Hoka One One Tracer nos cautivaron desde el primer segundo que las vimos, por su apariencia, por el tacto de sus materiales, por su ligereza, … infinidad de detalles nos llamaron la atención.
Mientras las tocábamos y escrutábamos por dentro y por fuera para tener una primera aproximación a ellas, no pudimos resistirnos a pasarlas por la báscula para comprobar su peso real porque estábamos volviéndonos locos ya que la sensación de ligereza chocaba con la de verlas con cuerpo suficiente casi para ser unas zapatillas de entrenamiento. Pues bien, el primer número que vimos fue un “1”, es decir, sub 200 gramos en el 8.5 USA que hemos utilizado para esta prueba lo que dejaría el 9 USA de referencia en poco más de 200 gramos. No son los 196 gramos que declara la marca pero es una cifra francamente sorprendente para unas zapatillas de este segmento, peso casi de voladoras. Quizá calzadas no se notan tan ligeras, pero creemos que es por lo angosta que es la horma y por la altura, por la falta de sensibilidad del terreno.
El tacto de la mediasuela prometía mucho porque es aparentemente blando al presionarlo con la mano pero sin demasiado recorrido a pesar del aparente grosor lo que apunta a buena respuesta y agilidad.
Los acabados exteriores son muy buenos, buena calidad, sin costuras, todo termopegados, buen tacto interior y exterior pero, zas, nos encontramos con un pegado un tanto regulero entre los dos bloques de la mediasuela. Venga, hacemos la vista gorda hasta ver cómo se comporta en marcha (qué tal es la transición de la pisada) y qué tal resiste el paso de los kilómetros (si se queda en una mera cuestión estética no es crítico y podemos aceptar pulpo).
La horma se nos hace bastante ajustada, no por la anchura, sino por la longitud (nos toca ir a por unos calcetines finitos) y algo por la altura (la parte inicial de la ojetera es bajita). Está bien que ajuste porque es una zapatilla teóricamente rápida pero la horma parece un tanto extraña, habrá que ver en marcha.
Los primeros pasos por casa nos gustan mucho y, aunque a los que no hayan utilizado nunca unas zapatillas con este tipo de suela curvada les pueden parecer extrañas al principio, es una sensación que rápidamente se olvida y que, en cuanto haces el gesto de correr, desaparece.
Tan a gusto nos sentíamos con las Hoka One One Tracer en los pies, que nos las tuvimos que quitar porque teníamos que ir a trabajar y con el traje no pegaban. Ahora, las citamos para por la tarde, que ahí sí que iríamos vestidos para la ocasión, para darles una primera carrerita a modo de primera cita.